Lecciones de Arcángeles
Cómo mejorar tu vida y encontrar alegría interior
INTRODUCCIÓN
Los recuerdos negativos pueden ser uno de los aspectos más difíciles de superar.
Influyen en el modo en que nos relacionamos con otras personas y en lo que pensamos de nosotros.
Pero no tienen por qué estar en nuestra mente consciente y ser un estorbo.
Tal vez estén bajo la superficie, pero influyen de forma sutil en nuestras relaciones y en cómo nos planteamos los problemas y las metas.
Zadquiel y los ángeles de la alegría pueden ayudarte en ese asunto de los recuerdos.
En la tradición judía, se conoce a Zadquiel como el ángel de la benevolencia, la misericordia y los recuerdos.
Él y sus ángeles pueden ayudarte a utilizar la llama violeta, esto es, la llama de Dios que vibra a más alta frecuencia, con el fin de disolver los recuerdos que te impiden desarrollar tu máximo potencial.
LECCIÓN
Conéctate con el Arcángel Zadquiel y los Ángeles de los Milagros, Misericordia y Libertad
Color: Violeta
Arcángel: Zadquiel, “justicia de Dios”
Hogar espiritual: Cuba
Lo que puedes pedirles:
- Dones espirituales: Libertad del alma, felicidad, alegría, perdón, justicia, misericordia, disolución de recuerdos dolorosos y de rasgos negativos.
- Ayuda práctica: Tolerancia; diplomacia; inspiración para científicos, ingenieros, arquitectos, actores y artistas.
- Problemas mundiales: Disolución de recuerdos de lucha entre naciones y grupos étnicos; inspiración para negociaciones creativas y la redacción de leyes, regulaciones políticas fiscales y económicas, acuerdos comerciales y de paz.
La llama violeta aporta a tu alma libertad, alegría y realización al liberarte de tu comportamiento limitativo.
Puede ayudarte a superar tu karma y los hábitos que te hacen vulnerable al dolor, al sufrimiento, a accidentes y a todo lo que te hace necesitar la ayuda de los ángeles.
¿Cómo funciona? En el pasado todos nosotros hemos utilizado mal la energía de Dios al bloquearla mediante pensamientos y sentimientos negativos.
Esa energía nos abruma y nos impide la unión con Dios.
En cuanto invocas la llama violeta con los decretos puedes cambiar la energía negativa por positiva. A este proceso se le llama transmutación.
Como ha dicho Zadquiel: “¡Toda esa energía aprisionada debe hallar la libertad por el poder de la llama violeta! Cada vez que recitas decretos de llama violeta y transmutes energía negativa, quedas liberado para recibir más dones y bendiciones de los ángeles.
La llama violeta también purifica el cuerpo físico del residuo de drogas, pesticidas y otras sustancias químicas que pueden estar perjudicando las funciones de tu cuerpo.
Si quieres saber cómo el Arcángel Zadquiel y los ángeles de la alegría pueden llenarte de este sentimiento, prueba con los decretos de la llama violeta y las visualizaciones de los ejercicios siguientes.
“El paso más grande que puedes dar hacia el progreso personal es el uso continuado de la llama violeta transmutadora.” Arcángel Zadquiel
Se ha dicho que Zadquiel es el ángel que detuvo la mano de Abraham cuando iba a sacrificar a su hijo Isaac.
Zadquiel es conocido como el ángel de la benevolencia, la misericordia y la memoria. Su nombre significa “justicia de Dios,” y nos enseña el uso correcto de las leyes de Dios en el séptimo rayo.
Santa Amatista reveló que ella fue uno de los ángeles que atendieron a Jesús en el jardín de Getsemaní.
El séptimo rayo se corresponde con el chakra de la sede del alma, que está situado entre el plexo solar y la base de la columna. En ese punto del cuerpo es donde reside el alma.
Zadquiel y Santa Amatista son el arcángel y la arcangelina del séptimo rayo.
El séptimo rayo es la llama violeta, el rayo que emite la llama violeta y concentra las cualidades de libertad, la alquimia, la transformación, el perdón y la justicia.
Es el rayo de Acuario, la era que está en sus comienzos y que durará 2150 años.
Zadquiel explica que la llama violeta es: “el disolvente universal que a lo largo de los tiempos han buscado los alquimistas”.
Los alquimistas de la época medieval querían transmutar los metales comunes en oro y descubrir el “elixir de la vida,” un medio de curar todas las enfermedades y asegurar la eterna juventud.
La palabra alquimia se define en un sentido más amplio como “un poder o un proceso de transformación de algo común en algo especial” y “una transmutación inexplicable o misteriosa”.
La forma de alquimia más elevada es la ciencia de la autotransformación. La clave de la autotransformación es la llama violeta.
El Arcángel Zadquiel nos dice que él posee en su corazón los secretos de la alquimia. Invócalos si quieres, nos dice, y él te los dará.
El retiro de Zadquiel y Santa Amatista, el Templo de la Purificación, se encuentra por encima de la isla de Cuba en la octava etérica.
Hace mucho tiempo en la Atlántida, es posible que visitáramos este Templo cuando estaba ubicado físicamente en la zona donde actualmente está Cuba.
En su retiro Zadquiel y Santa Amatista preparan a los niños de Dios para que lleguen a ser sacerdotes y sacerdotisas de la Orden de Melquisedec.
En los tiempos de la Atlántida tanto Jesús como Saint Germain estudiaron en este retiro, y el Señor Zadquiel ungió a los dos para este sacerdocio.
El Arcángel Zadquiel dice que la libertad, en su sentido supremo, significa un acceso a las reservas de luz, a la mente de Dios.
Cuando eres verdaderamente libre porque has asumido la responsabilidad de tus acciones, tus pensamientos, tus sentimientos, toda tu vida, entonces Dios te concede acceso a planos superiores y a reservas de luz que podrás utilizar para servir a la humanidad.
Zadquiel enseña: “En la plenitud de la libertad Divina.… no hay nada en el cosmos ni en Dios que se os niegue”. La clave para hallar esta libertad, nos dice, es la llama violeta transmutadora.
“Si el mundo actual fuera capaz de aceptar la llama violeta transmutadora, la mayoría de los problemas que turban a la humanidad se derretirían literalmente”.
Zadquiel quiere que sepas que cuando invocas esa luz, “millones de ángeles del séptimo rayo responden a tu llamado…”
La llama violeta funciona cuando la usas
La llama violeta no está presente a nuestro alrededor automáticamente.
La luz busca su propio nivel, el nivel de los reinos de perfección, cada veinticuatro horas y la llama violeta no entra en nuestro denso mundo a menos que la bajemos nosotros mediante el ejercicio de nuestro chakra de la garganta y afirmando la llama violeta y su acción, allá donde nos encontramos.
Para mantenerte en esa llama, invócala todos los días, de lo contrario volverá naturalmente atraída hacia su origen.
Un estudiante de Saint Germain dio testimonio del poder de transformación de llama violeta y dijo lo siguiente: “La llama violeta me ha curado. Durante años había consultado a psicólogos. Ellos me ayudaron a ver las causas de mis problemas, pero ¿cómo podía cambiar? Entonces encontré la ciencia de la Palabra hablada.
Todos los días hacía decretos a la llama violeta. Y ¡funcionó! Esa poderosa llama penetró y disolvió resentimientos profundos que ni siquiera sabía que tenía hasta que los vi terminar en la llama, para nunca más volver. ¡Gracias a la llama violeta salí sano, lleno de vigor y agradecido! Confío en ella todos los días.”
Otro estudiante dijo: “Cuando hago decretos de llama violeta, inmediatamente empiezo a sentirme más centrado y despejado. Si tengo cualquier duda sobre quién soy o cómo debo afrontar una situación difícil, la acción de la llama violeta inmediatamente lo esclarece todo y me ayuda a tomar las decisiones correctas. Esclarece mi mente y mis emociones”.
Zadquiel dice: “Fluyendo con el gran flujo del Espíritu Santo, la llama violeta libera cada partícula de energía mal cualificada que toca”.
Tu energía da color a tu aura
La energía de Dios que fluye hacia ti a cada momento es clara como el cristal. No tiene ningún color.
En cuanto la envías hacia fuera adquiere el color de tu vibración en ese momento y esto se ve en tu aura. Podría ser el rosa puro del amor.
Podría ser el amarillo de la iluminación si estás enseñando a alguien.
Podría ser azul si invocas la voluntad de Dios o tienes una fe intensa.
Si estás involucrado en curación, música, ciencia, la vida abundante, la economía, los negocios o si estás cualificando la energía en ese sentido, ello aumentará el verde en tu aura.
El aura podría asumir el blanco de la pureza o el color violeta de la alegría y la libertad. El color madre perla de la resurrección muestra que tus energías están elevándose y que estás en sintonía con el Cristo vivo.
Tu aura, por tanto, asume el color de aquello que tú hagas con la energía que fluye hacia ti noche y día.
Mientras vivas y respires, esa energía fluirá hacia ti. Si la cualificas mal con cualquier cosa negativa, incurres en karma; y ese karma pasa por su ciclo, reúne más de lo mismo y regresa a ti.
Cuando envías vibraciones e impulsos acumulados buenos y positivos, eso da la vuelta a la Tierra, reuniendo también más de lo mismo.
Esa energía buena te regresa al cabo de su ciclo y se eleva hacia tu cuerpo causal, aumentando los anillos de luz que este tiene.
Tal como sea el énfasis positivo de tu vida, esa será la esfera de tu cuerpo causal que aumentarás.
Así, el cuerpo causal es tu propia estrella individual. San Pablo dijo: “Una estrella es diferente a otra en gloria”. Tú tienes un cuerpo causal de luz único porque has enviado energía de forma única y esta ha regresado a ti y se ha acumulado en tu cuerpo causal. Este es el lugar donde tienes almacenado tus “tesoros en el cielo”.
Cómo saldar tu karma
El Arcángel Zadquiel y Santa Amatista, así como todos aquellos que prestan servicio en el séptimo rayo nos enseñan la responsabilidad que conlleva la libertad. Si, eres libre de odiar y libre de amar, pero recogerás la cosecha de tus propias palabras y obras.
Zadquiel dice que no puedes con un pensamiento o “sentimiento de crítica, condenación o juicio hacia cualquier individuo aportar ni una onza de libertad a esa alma ni una onza de libertad a la tuya”.
¿Por qué tener que repetir este curso en la escuela de la Tierra por no superar el propio resentimiento y la propia falta de resolución?
¿Por qué no recoger una cosecha de luz y avanzar hacia la siguiente escuela de la vida?
Decídete a amar con sinceridad a todo cuanto tiene vida. Cuando hagas esto, siempre encontrarás una razón para amar. Dios mora en cada corazón humano. Eso es motivo suficiente para amar a la gente y no criticarla ni condenarla.
Al usar la llama violeta, puedes tener acceso a la energía negativa que has creado, que es tu karma negativo. En el chakra de la sede del alma hay grabados muchos niveles de karma.
Para poder alcanzar el punto de la Cristeidad personal y la unión alquímica con el Cristo debes saldar ese karma.
La llama violeta es el regalo de Dios para poder transmutar esos registros, para transmutar todo el impulso acumulado de ese karma negativo, para transmitir una bendición a cualquier forma de vida que alguna vez heriste o agraviaste y para enviar esa misma bendición de llama violeta a aquellos que te han agraviado a ti.
Así es como la llama violeta te ayuda a saldar karma. La otra forma en la que puedes saldar karma es mediante el servicio que prestas a los demás, incluyendo el trabajo que haces todos los días.
No te tomes a ti mismo demasiado en serio. Dentro de cinco minutos serás una persona distinta, si usas la llama violeta. Así que no te preocupes demasiado por ti mismo. En cambio, pide la ley del perdón.
El perdón y la misericordia son la acción de la llama violeta. Envía la llama violeta a todos a quienes hayas agraviado y a todos a quienes te hayan agraviado a ti, y hazlo todos los días.
Pon todas las heridas y los dolores del corazón en la llama violeta y ¡suéltalos! No los vuelvas a retomar. No los vuelvas a mirar. Simplemente, déjalos ir a la llama. Y regocíjate.
* La llama violeta, si bien es efectiva para tratar problemas psicológicos, no reemplaza la atención profesional. La llama violeta es un facilitador y un complemento.
–FÍAT–
YO SOY LA LLAMA VIVIENTE DE LA LIBERTAD CÓSMICA
Ejercicio
Comienza a crear tu conexión personal con el Arcángel.
Visita el retiro etérico de Zadquiel y Santa Amatista
EL TEMPLO DE LA PURIFICACIÓN. El retiro de los Arcángeles del Séptimo Rayo
El Templo de la Purificación se encuentra en el reino etérico por encima de la isla de Cuba. Está presidido por el Arcángel Zadquiel y Santa Amatista. Visítalo durante la noche para desarrollar tu maestría en la ciencia de la invocación y en el dominio de la Palabra hablada.
"Padre, en Tus manos encomiendo mi espíritu. Oh, alma mía, elevémonos de nuestra morada. Poderosa Presencia YO SOY y Santo Yo Crístico, con el Arcángel Miguel y un cordón de ángeles de relámpago azul transporta esta noche a mi alma ataviada en mis cuerpos más puros, completamente protegida por la armadura de Dios, al retiro del Arcángel Zadquiel y Santa Amatista sobre la isla de Cuba o al lugar designado para mi labor sagrada. Escóltame, instrúyeme, guíame y protégeme, así como a todos los consiervos, te lo pido ahora y siempre mientras servimos para liberar a toda vida aquí en la Tierra."
Conoce a Saint Germain
Elizabeth Clare Prophet presenta a Saint Germain y la llama violeta.
Pon a prueba la llama violeta
Elizabeth Clare Prophet enseña cómo usar la llama violeta diariamente.
¡YO SOY un ser de fuego violeta! ¡YO SOY la pureza que Dios desea!